Etapa 8. Madonna di Campiglio-Riva del Garda

La última etapa es bien entretenida, de paisajes cambiantes, desde los muros gigantes del Adamello a las praderas y lagos del Val d'Agola o el deslumbrante final en el Lago de Garda.
Desde Madonna di Campiglio sale una carretera que se convierte en pista e indica el refugio Vallesinella, por una pista con barrera, de pago para los autos. Es un paseo muy agradable por el frondoso bosque con hayas y alerces y una catarata rumorosa. Luego se sube hacia el lago de Val d'Agola por pista y sendero y muchos senderistas. Se bordea el lago y después hay que desmontar, subiendo a pie por un sendero de pendiente imposible, además de estar prohibido subirlo en la bici, cumpliendo la normativa del  Parque Natural Adamello Brenta. Llegamos al Passo Bregn de l'Ors con amplios panoramas sobre las montañas, hoy veladas por las brumas. Seguimos subiendo al siguiente collado, el Passo di Gotro. Gran descenso por senderos y pistas hasta el fondo del Val di Algone por carreteras muy secundarias con poblaciones  interesantes como Stenico, con su castillo, o Ponte Arche sobre el elegante puente que le nombra.
El Val Lomasona llega a continuación con unos solemnes paredones calcáreos que atraen a muchos escaladores. Seguimos  una pista que al rato se abandona por un sendero que discurre por un río seco de piedras y muy pendiente en el que hay que volver a empujar la bici. Así llegamos al Passo San Pietro y luego continuamos por una pista asfaltada que ya nos lleva a una carretera desde la que se ve el gran lago al fondo. La bajada es soberbia, pasando por pueblos regios, como Tenno, con vistas cercanas sobre el lago esplendoroso y la dulce sensación de llegar al final del viaje. 
Como ese día no habíamos reservado alojamiento por Internet, fuimos a La Oficina de Información  a buscar posada y fonda. Con sobria eficiencia la funcionaria nos ofreció varias posibilidades y reservó en un momento desde allí mismo una habitación en el Albergo-Garni Beniamino, un agradable lugar tranquilo y muy conveniente.
Al día siguiente nos dedicamos al paseo y visita de la muy interesante ciudad con un centro histórico bien cuidado. En el Museo Cívico estuvimos por la noche, visitando varias exposiciones y nos invitaron a  subir a la torre desde la que se domina la ciudad y el lago para que pudiéramos degustar unas copas de un vino espumoso aromático y fresco, semejante al Prosecco del Véneto. Gratis y con entusiasmo Trentino.
La vuelta a por el auto, que habíamos aparcado en Verona, fue más sencilla que en esta península ibérica porque muchos autobuses tienen en el portón trasero unos ganchos para subir las bicis. O llevan un remolque para la misma función. Para llegar hasta Peschiera del Garda, bordeando todo el lago de norte a sur, tuvimos que hacer una parada en Garda y esperar a otro autobús que nos llevó hasta Peschiera. 
Allí subimos a las bicis y en 24 km llegamos a Verona, en donde estaba el auto intacto.
La vuelta a la península ya forma parte de otra historia que no sale en estas páginas. Continuará.



 70.17 Km
 1382.44 m
 2845.5 m
 37.88 Km
 7:26:40
 109 BYC

Enlace a Cicloide

A Vallesinella


Lago Val d'Agola













Tenno y Riva del Garda




Desde el lago

No hay comentarios:

Publicar un comentario