Hacemos una ruta de bici de carretera pasando por varias comarcas: Gúdar-Javalambre, Cuencas mineras, Teruel y Maestrazgo. El primer día salimos desde La Virgen de la Vega y llegamos a Ejulve por unas carreteras de firme regular, sin tráfico y suaves sube/bajas con algunos puertos no muy exigentes, Gúdar, Aldehuela, Majalinos, pero de los que se notan. Además de los chopos, que se están encendiendo en el otoño caluroso, son de mención especial los parajes ondulados de geología pura y dura en torno a Aliaga, con un parque geológico para visitar sin apremios. Luz y yo no tenemos prisa y vamos disfrutando de panoramas silenciosos y aires puros, ideales para ensimismarse y encantarse.
Al día siguiente hacemos la etapa de vuelta por otro recorrido más exigente con varios puertos sin descanso, acumulando imágenes imborrables como la subida junto a los Órganos de Montoro, un monumento natural único en el mundo, solitario, apartado de las masas turísticas costeras. O el ascenso hacia Valdelinares con pendientes fuertes durante kilómetros. La llegada al punto de partida nos sorprende con una hilera de chopos que en un día se han transfigurado con colores fulgurantes. Es lo que tiene el otoño, nunca defrauda.
Al día siguiente hacemos la etapa de vuelta por otro recorrido más exigente con varios puertos sin descanso, acumulando imágenes imborrables como la subida junto a los Órganos de Montoro, un monumento natural único en el mundo, solitario, apartado de las masas turísticas costeras. O el ascenso hacia Valdelinares con pendientes fuertes durante kilómetros. La llegada al punto de partida nos sorprende con una hilera de chopos que en un día se han transfigurado con colores fulgurantes. Es lo que tiene el otoño, nunca defrauda.
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