13 sept 2020

Valle de Tena. Pico Gavizo-Cristales (2.890 m).

 Una cumbre espléndida para paseantes, sin sendero evidente, sin multitudes, sin llegar a los tresmil, con vistas inigualables.

Salimos desde el Embalse de La Sarra por el sendero que bordea su margen derecha. Sube esa senda por el trazado del GR-11, bien señalizado hacia Respomuso, embalse y refugio. Siguiendo el sendero por el margen derecho del río Aguas Limpias se sube al refugio; sin pasar por él continuamos el ascenso hasta el Embalse de Campoplano, desde donde ya se ve la cima del Cristales. 

Bordeamos el embalse por el Sur y nos dirigimos al collado de La Piedra de San Martín, muy evidente, al Norte. Antes de llegar al collado giramos a la izquierda continuando por terreno sin sendero definido, con algunos hitos. La subida por las inclinadas laderas pedregosas no se hace fácil porque hay tramos con piedra suelta muy pendientes. Buscando los escasos hitos se llega a la cima, bien airosa. El panorama que se tiene desde ese punto es extraordinario, con el Balaitús enfrente. La Cresta del Diablo, la Arista de Le Bondidier, los Picos de la Frondella se observan muy cercanos con todo detalle. Más lejos el Cambalès, Gran Facha, Llena Cantal, Vignemale, Tebarray, Infiernos, Tendeñera... 

Tras un rato admirando el panorama desde la cima, bajamos en busca de trazas de sendero en dirección Sur, hacia Respomuso. Como no hay sendero evidente vamos intentando localizar los hitos que puedan orientar el largo descenso. Tras bajar las escarpadas laderas pasamos por encima del refugio y volvemos a tomar el GR-11 para llegar hasta el Embalse de La Sarra, de donde salimos. 

En el hayedo hacia Respomuso


                                        Circo de Piedrafita

Ibón de Campoplano

Subiendo sin sendero


Cima Gavizo-Cristales

Balaitús

Frondellas, arista Le Bondidier y Balaitús

Cresta del Diablo y Balaitús

El mar de nubes en Francia


En la cima

Gran Facha, Campoplano, Llena Cantal, Piedrafita.

Embalse de Respomuso


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3 sept 2020

Camino Primitivo. Etapa 8. Melide-Santiago de Compostela.14/8/2020

Última etapa, que discurre por el Camino Francés en vivo contraste con el Primitivo: hay masas de peregrinos, restaurantes, bares y alojamientos por todos los rincones. En cada aldea se encuentran albergues, tascas, chiringuitos y tabernas. 

El recorrido es una sucesión de subidas y bajadas que pasa por pistas, corredoiras y carreteras enlazando aldeas y pueblos. 

Algunos tramos más interesantes por robledales y plantaciones de eucaliptos siguen a otros caminos muy transitados sin demasiado interés. 

En continuado sube y baja se avanza pasando algunos riachuelos y fuentes en las que refrescarse. El perro necesita esos alivios. 

Llegamos, tras bordear el aeropuerto de Lavacolla, al Monte del Gozo, lugar desde el que se ve la ciudad con las torres de la catedral sobresaliendo en el panorama. Desde ahí se baja para llegar al último albergue del camino, el Albergue Acuario. Gente amable en instalaciones precarias.





La Taberna Tía Dolores

Multitudes en el Francés






                                                                          En el Monte del Gozo






Alqo, recuperando.

Camino Primitivo. Etapa 7. Lugo-Melide. 13/8/2020


Penúltima etapa, tras un día de parada en Lugo por las lluvias incesantes. 

(El perro no soporta bien la lluvia, es de secano) 

Salimos de Lugo por una carretera en descenso que más adelante asciende en la tónica del día: mucho asfalto y pistas subiendo y bajando. Caminos, corredoiras sombreadas, carreteras secundarias sin tráfico se suceden conectando aldeas y pueblos en unos parajes ondulados para hacer kilómetros sin sobresaltos. Hay anunciado un desvío a un templo romano, pero por fuera no se ve nada y ya hemos comprobado que no hay atención. Llegamos al pueblo de Ferreira en donde se podría encontrar albergue y restaurante, pero hasta media mañana no abren. El puente romano sobre el río Ferreira por el que pasamos es el hito de la jornada. 

Tras Ferreira continuamos por caminos y pistas en moderado ascenso pasando por varias aldeas y pueblos tan desiertos como las carreteras. 

Varios pueblos con alguna iglesia interesante, Castros en As Seixas y Vilouriz, riachuelos limpios, fuentes y arboledas acompañan hasta llegar a Melide, pueblo con todos los servicios en el que se acaba el Camino Primitivo al confluir con el Francés. 

Alojamiento en Casa Somoza, a 5 km de Melide, en el Camino Francés. Gran amabilidad y atención esmerada en una instalación con jardines, lejos del pueblo.

(Como el perro estaba fatigado al llegar a Melide y el hotel estaba lejos, fuimos a hablar con el dueño a la pulpería mejor de Melide, La Garnacha. Nos hizo el favor de guardarnos las bicis en su garaje de Melide. En su auto nos llevó a los tres hasta el hotel y al día siguiente volvió a buscarnos para que recogiéramos las bicis y empezar la última etapa sin los kilómetros de más)

 

Melide




Puente romano de Ferreira




                                Sao Romao da Retorta


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Camino Primitivo. Etapa 6. O Piñeiral-Lugo. 11/8/2020

Sexta etapa que empezamos en el mar de las nieblas cotidianas, despejando a medida que se avanza hacia el Oeste. El sube y baja habitual comienza nada más dejar el albergue, tomando una pista que va llaneando y subiendo hacia las ruinas del hospital de Montouto. Cerca hay un dolmen, lo más llamativo de la jornada. De ahí se baja por amplias pistas a Paradavella en donde hay tiendas de abastecimiento y luego, tras una fuerte subida, se llega A Lastra. Más adelante pasamos por Fontaneira, ante cuya iglesia encontramos un bar que se despereza. Un leve reposo y café es obligado. Pistas amplias, a la gallega, se suceden con algún tramo de carretera para llegar tras un descenso prolongado a O Cádavo, un pueblo en el que hay abastos. 

Del pueblo salimos por una pista que sube hasta el Alto de Vaqueriza y luego desciende hasta Castroverde, pueblo con una buena fuente y merenderos bajo los castaños para hacer un alto en el camino. 

Por sucesión de pistas y algunos pequeños tramos de asfalto vamos recorriendo aldeas y pueblos en paralelo a la carretera que se dirige a la ciudad amurallada. Se llega a Lugo por pistas que acaban en un barrio desde el que se asciende por último al alojamiento, el Aparthotel Ciudad de Lugo. Limpio.




El Dolmen de Montouto








Castaños en el merendero de Castroverde