Esta es una prueba para ver si por otro camino distinto del que era habitual, y ahora está negado por el error bx, se puede subir una entrada. Lo que hago es utilizar la aplicación de blogger que tenía en el ipad y no había usado nunca; es mucho más engorroso el procedimiento y más limitadas las operaciones, pero me deja subir entradas, así que vuelvo a estar comunicado a distancia austral con una acumulación de etapas que no sé si me dará tiempo a poner al día porque cuando escribo ésto estoy en Coyhaique y es día 20 y las entradas que voy subiendo son de hace una semana. O sea, lo de siempre.
La primera etapa parte de Puerto Montt y siguiendo los indicadores de la carretera austral salgo de la ciudad bordeando el enorme golfo de Reloncaví. La carretera es de firme excelente y trazado que se sigue en un sube y baja que va a ser la tónica del viaje. Etapa rompepiernas que se divide en dos partes. Unos 50 km hasta llegar a Caleta La Arena, en donde se toma un transbordador que lleva hasta la Caleta Puelche; un trayecto de media hora recorriendo un fiordo bastante abierto.
A partir de Puelche se acaba el asfalto, el pavimento lo llaman aquí, y comienza el ripio, la pista de tierra y piedra suelta que diríamos en la península. Los sesenta km hasta llegar a Hornopirén atraviesan selvas húmedas más bien frías y el sube y baja aquí es extremo con tramos de pista muy deteriorada por las máquinas que están trabajando en la pista: el plan es asfaltar toda la carretera austral y el plazo para terminar es 2015. Creo que no será posible por lo que he ido viendo más al sur.
Se llega a Hornopirén que no es más que un conjunto de casas de una o dos alturas y muros cubiertos con piezas de alerce (alerce austral que no tiene nada que ver con el boreal) que recuerdan en todo al tavaillon del Jura, aunque más tosco, sin el cuido que ponen los jurásicos en sus fachadas.
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