Desde Bessans me vine a la Bella Italia y para ahorrar kilómetros y combustible se me ocurrió lo más práctico: atravesar por el túnel del Fréjus, unos 10 km. Cuando llegué a la caseta del peaje y me pidieron 43 € ganas me entraron de retroceder y dar toda la vuelta por Grenoble. La cajera debió ver la cara de consternación que se me quedó y no hacía más que repetir que en Francia los túneles son muy caros y que el del Mont Blanc también costaba igual. O sea, me timaron en condiciones.
En Pragelato, un pueblo diseminado por varias fracciones con sus propios nombres, hay una discreta estación de esquí de fondo que todavía no he recorrido y muchos, muchos montes para subir con los esquís de travesía. Ayer hizo un tiempo perruno, pero hoy se ha podido subir a un pico con vistas, el Morefreddo, en un día clásico invernal, con más frío en el valle que en la cima. Aquí seguiré hasta el jueves y luego ya lo irán viendo en estas páginas intangibles.
Un comentario sobre la foto de los alerces (a los que acompañan algunos pinos, esos sí están verdes): como saben, estos árboles son coníferas que pierden la hoja en invierno, transición evolutiva hacia el gran invento de los árboles de hoja caduca y plana; no es que sean pinos afectados por la lluvia ácida como hemos oído alguna vez.
Pragelato
Pitre de l'Aigle
Hoy he subido a este pico porque me dijeron que tenía unas vistas espectaculares sobre los montes de Hautes Alpes y Savoie, mejor que el de ayer. Cuando llegué arriba se había cerrado bastante y la visión era más que limitada, con las nubes de la tormenta lejos, pero avanzando. Además la nieve en estado lamentable ha complicado la bajada y la subida. Véase el track en el enlace. Eso sí, ahora está cayendo una nevada importante.
Muchos nombres son aquí medio franceses porque hasta el siglo 17 esta zona era francesa y en este valle se declararon protestantes en contraste con el resto católico de Francia. Los echaron del valle por no convertirse a la religión verdadera, la buena, la auténtica; raro me parece que no los laminaran. Esto es lo que cuentan por aquí.
En Pragelato, un pueblo diseminado por varias fracciones con sus propios nombres, hay una discreta estación de esquí de fondo que todavía no he recorrido y muchos, muchos montes para subir con los esquís de travesía. Ayer hizo un tiempo perruno, pero hoy se ha podido subir a un pico con vistas, el Morefreddo, en un día clásico invernal, con más frío en el valle que en la cima. Aquí seguiré hasta el jueves y luego ya lo irán viendo en estas páginas intangibles.
Un comentario sobre la foto de los alerces (a los que acompañan algunos pinos, esos sí están verdes): como saben, estos árboles son coníferas que pierden la hoja en invierno, transición evolutiva hacia el gran invento de los árboles de hoja caduca y plana; no es que sean pinos afectados por la lluvia ácida como hemos oído alguna vez.
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Pragelato
Pitre de l'Aigle
Hoy he subido a este pico porque me dijeron que tenía unas vistas espectaculares sobre los montes de Hautes Alpes y Savoie, mejor que el de ayer. Cuando llegué arriba se había cerrado bastante y la visión era más que limitada, con las nubes de la tormenta lejos, pero avanzando. Además la nieve en estado lamentable ha complicado la bajada y la subida. Véase el track en el enlace. Eso sí, ahora está cayendo una nevada importante.
Muchos nombres son aquí medio franceses porque hasta el siglo 17 esta zona era francesa y en este valle se declararon protestantes en contraste con el resto católico de Francia. Los echaron del valle por no convertirse a la religión verdadera, la buena, la auténtica; raro me parece que no los laminaran. Esto es lo que cuentan por aquí.
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